domingo, 26 de junio de 2011

El arte de fichar

¿Qué tipos de jugadores le gustan a Mourinho? Es sin duda unos de los entrenadores más conocidos, más excéntricos, más queridos, más odiados y con más éxito en el mundo del fútbol. Pero ¿con qué tipo de jugadores ha contado? ¿A qué jugadores suele fichar? Intentemos comparar, aunque en algunos casos no sea justo, por qué jugadores Mourinho siempre ha tenido cierta debilidad.

Empecemos con el Oporto tras haber ganado la UEFA en el 2003, una victoria que suponía más dinero para el conjunto portugues. Su fichaje más caro de aquel verano fue, como veremos, un fichaje muy típico para el portugués. Fichó a Thiago Silva – ahora central del Milán – cuando este tenía 18 años del Juventude y pagó unos 5 millones de euros por él. No fue jugador de revelación en el Oporto de Mou, ni siquiera llegó a debutar en el primer equipo, sin embargo, viendo su trayectoria en los últimos años hay que reconocer que Mourinho ya había descubierto su gran talento.

En invierno también fichó a otro brasileño joven, a Carlos Alberto, quien marcó el primer gol de la final de la champions de 2004. Carlos Alberto no se ha convertido en una estrella en el mundo del fútbol, sin embargo Mourinho fue el único entrenador que sabía tratarle porque en los demás destinos el jugador fracasó, ya que los entrenadores no confiaron en él.
En aquella temporada también tuvo mucha importancia que vendiera a Helder Postiga, quien a sus 20 años estaba muy descontento y podría haber supuesto problemas en caso de seguir en el banquillo.

Tras haber ganado la Champions con el Oporto, Mourinho fichó por el nuevo juguete de Roman Abramovich, el Chelsea, con todo el dinero que tendría a su disposición. El portugués echó a varios jugadores ya mayores que no hubieran cuajado en su estrategia como Verón, Crespo, Zenden o Hasselbaink, ya que podrían causar problemas en el vestuario al no aceptar su suplencia. Allí ya se podía ver que a Mou le da igual el pasado de un jugador, como en el caso de estos cuatro, sino que lo único que le interesa es si tienen el nivel de jugar en su equipo ahora o no.
De nuevo, su fichaje más caro fue apostando por un jugador que ya había mostrado su talento pero todavía no había tenido la oportunidad de jugar en un equipo grande. Fue Didier Drogba al que fichó por 38 Millones. Mucha gente vió en él un gasto exagerado pero se equivocaron. Además, tras su buena experiencia con ellos en el Oporto se llevó a Carvalho y Paulo Ferreira. Sin olvidar su acierto en los fichajes de Robben y Cech, que tras sus buenos rendimientos en el PSV y el Stade Rennes respectivamente, cobraron gran importancia a las órdenes del portugués. Mourinho demostró que sabía arriesgar y acertar.

El caso de Andriy Shevchenko, que fue uno de sus mayores fracasos, fue justo un jugador al que el de Setubál no le despertaba demasiado agrado, sino que fue una apuesta de Abramovich para la temporada 2006/07. Mou no le quería fichar porque no veía en él un jugador dispuesto a jugar para ganar títulos, a trabajar para el equipo y que consideraba, que ya había jugado sus veinte mejores partidos.
Los fichajes de ese verano que tenían sabor a Mourinho fueron otros. Los de los talentos desconocidos como Salomon Kalou o John Obi Mikel. O también su debilidad por jugadores con experiencia que ya habían mostrado que eran capaces de jugar de forma agresiva, sobre todo defensivos, y que a pesar de su edad mostraban ambición.. Un caso muy ejemplar fue el de Michael Ballack. Ballack estaba a punto de cumplir 30 años, fue capitán de Alemania y buen jugador, sin embargo no fue un mediocentro creativo sino que se esforzó más para el equipo, algo que exigió Mou. No obstante fue criticado duramente por la prensa inglesa por quitarle puestos a jugadores más ofensivos.

18 meses después, cuando Mourinho ya no era entrenador del Chelsea y se abrió el mercado de invierno el Chelsea fichó, entre otros, a Nicolas Anelka. Mourinho probablemente nunca hubiera pensado en el francés para un equipo suyo por los numerosos tumbos que dio entre clubes, causa de su fama de provocador, algo volvió a demostrar hace alrededor de un año cuando fue expulsado de la selección francesa.

Tras una breve temporada sabática, en su primer año en el Inter fichó al centrocampista Sulley Muntari por 15 millones. Es un jugador alto, corpulento y agresivo, un jugador regular con un precio exagerado pero jugó muchos partidos en los dos años que estuvo con Mou porque justo cumplió con lo que le pidió. Trabajar para el equipo y no participar en el juego ofensivo. Se podría decir que era el prototipo de Pepe en el mediocampo.
Su mayor golpe fue la temporada 2009/10 cuando vendió a Ibrahimovic, en su día el máximo goleador de la Serie A. Ibrahimovic, sin duda un gran futbolista, no fue el tipo de jugador que necesitó Mourinho para ganar la Champions. No siempre parecía que se estaba esforzando al máximo y además tiene su carácter de divo le perjudicaba. La macha del sueco collevó la llegada de Eto’o, un jugador que hacía mejor a sus compañeros por su calidad individual pero también porque era uno de los pocos delanteros que luchaba para el equipo.
A parte de ello, Mourinho necesitó fortalecer la defensa y fichó a Lúcio, un veterano que todavía estaba en forma y dispuesto a sacrificarse, fichó a uno de los medios menos talentosos pero más duros, Motta, y a los jugadores de mayor relevancia de aquella temporada, Sneijder y Diego Milito.
El único con el que Mou no pudo es el actual delantero del Werder Bremen, Marko Arnautovic, seguramente porque veía que podía causar ciertos problemas vino en calidad de cedido.

Finalizada su etapa en el Inter con el Triplete como aval fue contratado por el Real Madrid, dónde sigue con su estilo. Las jóvenes promesas poco conocidas, y además caras, fueron di María y Özil que ahora se han convertido en auténticas estrellas del fútbol, y los jugadores defensivos y agresivos Khedira y Carvalho. A Khedira le pasa lo mismo que a Ballack y a Muntari. Son jugadores criticados por los medios de comunicación porque ofrecen poco espectáculo pero son piezas claves en el esquema de Mourinho. ¿Por qué no he mencionado a los fracasos (hasta ahora) de Canales, Pedro León y Adebayor? Porque son jugadores a los que Mourinho probablemente nunca hubiera fichado. Canales y Pedro León fueron propuestas de Valdano, mientras que Adebayor fue fichaje de invierno pero no fue el delantero al que quería Mourinho. Estos fueron Almeida y Dzeko.
 
Ya está confirmado que Altintop, Callejón y Sahin jugarán para el Madrid la proxima campaña. Sahin fue el mejor jugador de la Bundesliga la temporada pasada y promete mucho. Altintop guardará silencio cuando le toque estar en el banquillo (algo que supuestamente pasará mucho) y dará todo cuando juegue, además es un jugador que puede jugar de lateral, de extremo y en el centro de campo. Callejón, por su parte, enamoró a Mou en el choque entre pericos y blancos por su capacidad de desborde y es otra apuesta de futuro. 

En definitiva, Mourinho no suele fichar grandes estrellas. Prefiere invertir dinero en talentos de ligas menos mediáticas a las que convierte en estrellas o apuesta por jugadores ya mayores, sobre todo defensas y pivotes, que han mostrado un nivel estable en su carrera y suelen jugar con cierta agresividad. Mourinho no siempre acertó, pero la cuota de aciertos que tiene es impresionante.

Tom Ole

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